martes, 21 de mayo de 2013

La "civilización" de la hevea, colonialismo empresarial. Tercera parte.

Roger Casemente en el Amazonas
Tomado de: //www.oscarhumbertogomez.com

Debemos tener en cuenta que una vez que los países de Europa descubrieron nuevos territorios diferentes a los suyos, comenzaron a explorar además de explotar sus recursos y depender comercialmente de otros países, como lo dice Marx en el mismo Manifiesto Comunista anteriormente mencionado, “En lugar del antiguo aislamiento de las regiones y naciones que se bastaban a sí mismas, se establece un intercambio universal, una interdependencia universal de las naciones” (Marx & Engels, 1973), se dio comienzo a una nueva era del mercado global, transnacional, llamada la globalización, quien dio pie a las relaciones públicas internacionales de Wilcox.


Stanley no solo era el encargado de explorar nuevos territorios, tenía además, el deber de hacer firmar a los jefes de las aldeas que encontraba a su paso, “contratos, escritos en francés, comprometiéndose a prestar mano de obra, alojamiento, guía y sustento a los funcionarios, personeros y empleados de la AIC (Asociación Internacional del Congo) en los trabajos que emprendieran”, (Vargas Llosa, 2010) así fue como Roger fue descubriendo la cruda verdad de la explotación indígena que los países europeos habían prometido no cometer, hizo a la vez parte de la construcción del Estado Independiente del Congo, donde Leopoldo se hizo dueño y señor y donde se abrían caminos, ciudades comerciales y una nueva fuerza pública (La Force Publique) compuesta por mil soldados del ejercito regular Belga y una milicia de diez mil nativos listos para hacer cumplir las leyes, todo esto con el fin de “civilizar”. En este caso la explotación del Estado en manos de Leopoldo II estaba ligada como lo muestra Antonio Castillo a las relaciones públicas Internacionales.
El Congo
Tomado de: /teodosio-tuscienciassociales.blogspot.com

Sin detallar las agresiones, matanzas, castigos y mutilaciones que sufrieron los nativos a costa del servicio de las grandes empresas caucheras, sin salario, ni comida, hay que dejar claro que la presión creada por la explotación y el ánimo de ganancia pudo sobrepasar los postulados del Acta General firmada en Berlín. El Libro Negro del Colonialismo deja entonces un apartado de las muchas contradicciones de las naciones, “Heredero directo de esa esclavitud cuya abolición era una de las principales justificaciones de la presencia de los colonizadores, el trabajo forzado fue legalizado en 1892 para contribuir a la construcción y mantenimiento de las pistas y de los primeros equipamientos colectivos, a la tala de los bosques, al transporte por porteadores”. (Ferro, 2003)

Bibliografía


Achbar, M., Jennifer, A., & Joel, B. (Dirección). (2003). The Corporation [Película].
Castillo Esparcia, A. (2001). Relaciones Públicas Internacionales. Relaciones Públicas Internacionales.
Ferro, M. (2003). Dominaciones y resistencias. En M. Ferro, El libro negro del colonialismo (págs. 509-531). Madrid: La Esfera de los Libros.
Marx, K., & Engels, F. (1973). Textos sobre el colonialismo. Córdoba: Pasado y Presente.
Molina Londoño, L. F. (2001). La Casa Arana. La Nota Económica, 86-88.
Pineda Camacho, R. (2000). Holocausto en el Amazonas. Bogotá: Planeta Colombiana Editorial S.A.
Vargas Llosa, M. (2010). El Sueño del Celta. Madrid: Alfaguara.

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